sábado, 24 de mayo de 2008

Carlos Montero (1976-1987)

Ya casi me había olvidado de mucho de lo que aprendí, así como de la gente que me lo enseñó, pero el recuerdo que ha vuelto a mi mente al tener la noticia de la Escuela y leer lo que habéis publicado me ha hecho entender el porque hoy día siento determinadas cosas y tengo determinados valores en la vida. Mis principios me los enseñaron allí y fue junto a todos vosotros que hoy también los atesoráis.
En realidad nuestra soñada Historia Interminable acabo sucediendo, cada uno de nosotros tiene una por contar y deberá serlo en otra ocasión, ya que ahora toca hablar de la escuela que se nos va, pero todas esas historias nacen de ese libro abierto que era el cole, cada una de sus páginas estaba escrita por un profesor y a partir de ellas vamos escribiendo la nuestra.
Hay una foto de mi clase publicada en este blog, observándola, soy capaz de decir el nombre y los apellidos de todos y cada uno de los que aparecen en ella, cosa que no me sucede con mis compañeros de Bachillerato y mucho menos con los de ninguna de las Universidades donde he estudiado. Eso me hace reflexionar sobre mis raíces y, ahora que soy padre, reforzarme en el deber de rellenar esa infinita imaginación que tienen, que tenemos, los niños.
Esto no es el fin de nada, en realidad, todos perdimos hace tiempo el contacto entre nosotros y con la Escuela, pero puede ser un buen motivo para recordar y volver a vivir en nuestras mentes los olores, ruidos, voces, imágenes y sobretodo, a esas personas tan importantes en esa etapa de nuestras vidas y que, si buscamos dentro nuestro, lo siguen siendo. Haciendo esa reflexión tal vez consigamos incluso entendernos un poco mejor a nosotros mismos.
Un abrazo para cada uno de vosotros.


Carlos Montero.
1976-1987

1 comentario:

Rossy dijo...

Te has fijado que sales en una de ella? En la del puerto de Ibiza, justo a la izquierda del profe Miguel.